sábado, 30 de octubre de 2010

Vientos del Pueblo

Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.
Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantán
y al mismo tiempo castigan
con su clamarosa zarpa.
No soy de un pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
Asturianos de braveza,
vascos de piedra blindada,
valencianos de alegría
y castellanos de alma,
labrados como la tierra
y airoso como las alas;
andaluces de relámpagos,
nacidos entre guitarras
y forjados en los yunques
torrenciales de las lágrimas;
extremeños de centeno,
gallegos de lluvia y calma,
catalanes de firmeza,
aragoneses de casta,
murcianos de dinamita
frutalmente propagada,
leoneses, navarros, dueños
del hambre, el sudor y el hacha,
reyes de la minería,
señores de la labranza,
hombres que entre las raíces,
como raíces gallardas,
vais de la vida a la muerte,
vais de la nada a la nada:
yugos os quieren poner
gentes de la hierba mala,
yugos que habeís de dejar
rotos sobre sus espaldas.
Crepúsculo de los bueyes
está despuntando el alba.
Los bueyes mueren vestidos
de humildad y olor de cuadra:
las águilas, los leones
y los toros de arrogancia,
y detrás de ellos, el cielo
ni se enturbia ni se acaba.
La agonía de los bueyes
tiene pequeña la cara,
la del animal varón
toda la creación agranda.
Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Muerto y veinte veces muerto,
la boca contra la grama,
tendré apretado los dientes
y decidida la barba.
Cantando espero a la muerte
que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.

jueves, 28 de octubre de 2010

CENTENARIO DE MIGUEL HENANDEZ (30-10-2010)

Te me mueres de casta y de sencilla...
Estoy convicto, amor, estoy confeso
de que, raptor intrépido de un beso,
yo te libé la flor de la mejilla.

Yo te libé la flor de la mejilla,
y desde aquella gloria, aquel suceso,
tu mejilla, de escrúpulo y de peso,
se te cae deshojada y amarilla.

El fantasma del beso delincuente
el pómulo te tiene perseguido,
cada vez más patente, negro y grande.

Y sin dormir estás, celosamente,
vigilando mi boca ¡con qué cuido!
para que no se vicie y se desmande.






Besarse, mujer,
al sol, es besarnos
e toda la vida.
Ascienden los labios
eléctricamente
vibrantes los rayos,
con todo el fulgor
de un sol entre cuatro.
Besarse a la luna,
mujer, es besarnos
en toda la muerte.
Descienden los labios
con toda la luna
pidiendo su ocaso,
gastada y helada
y en cuatro pedazos.




 [cada vez más patente negro y grande...]

miércoles, 27 de octubre de 2010

Desechos de tienta

Si es que tiene razón Reverte. Cojones. en españa hasta en el reparto de los malos nos tocan los desechos de tienta.


En morón de la frontera, pueblo de la provincia de Sevilla se ha detenido a una pareja por repartir octavillas DONDE SE INCLUÍA LA DIRECCIÓN DE SU CASA, publicitando un descuento de 5 euros por gramo de coca que se les comprara. (Un aplauso por favor.)







Otro tonto de las pelotas: dragó y las lolitas



Más: todos los que no han querido entender a Reverte y aun no se han acostumbrado a como se expresa






De traca somos. De traca.

Me dejo a Rajoy, a la profesora de los moros, a bibiana aído, al alcalde de valladolid. Ya saben no?





viernes, 22 de octubre de 2010

Ey! bonitas piernas!

A qué hora abren?





[Tengo todo el aire del norte en el pulmón y ya no necesito gritar, tengo todo el viento apuntando a mi favor y ya no necesito gritar...]